Eds. F. Javier Díez Morrás, Roberto G. Fandiño Pérez, Pablo Sáez Miguel. La ciudad de Santo Domingo de la Calzada posee un rico e intenso pasado, el cual se percibe aún en la actualidad a través de su relevante patrimonio. La génesis de la localidad se encuentra en la labor asistencial con raíz jacobea iniciada desde mediados del siglo XI por el santo que le da nombre, desarrollada seguidamente con el favor de monarcas e instituciones. Con anterioridad a esa época, la que posteriormente se erigirá como comarca calceatense se había caracterizado por contar durante siglos con una intensa presencia humana, la cual jalonará el entorno de importantes vías y asentamientos. El desarrollo del nuevo núcleo desde época plenomedieval, asentado de forma rápida por el establecimiento de nuevos pobladores y de importantes instituciones políticas y religiosas, llevará a la erección de la localidad como centro neurálgico de un amplio territorio. Sin duda su capitalidad política como cabeza del Corregimiento de Rioja desde los siglos XV a XIX y la co-sede episcopal, ostentada desde el siglo XIII, marcarán el decurso calceatense durante todos esos siglos. El nuevo esquema del Estado liberal desarrollado a partir del siglo XIX conllevará la lenta pero progresiva pérdida de relevancia política de la ciudad, pero ello no implicará la disminución de su importancia regional.